Oración a Jesús: Un Encuentro de Fe y Amor
Introducción
Jesucristo es el centro de la fe cristiana y la fuente de amor, esperanza y salvación para millones de creyentes en todo el mundo. A través de la oración, podemos fortalecer nuestra relación con Él y recibir su guía en nuestra vida cotidiana.
En este artículo, exploraremos quién es Jesús, su papel en la historia de la humanidad y cómo una oración sincera nos acerca a su misericordia y amor incondicional.
¿Quién es Jesús?
Jesucristo es el Hijo de Dios, enviado al mundo para la salvación de la humanidad. Nació de la Virgen María por obra del Espíritu Santo y vivió en la tierra predicando el Evangelio, realizando milagros y enseñando el amor de Dios.
Su vida culminó con su Pasión, Muerte y Resurrección, otorgando a todos los que creen en Él la esperanza de la vida eterna. Jesús es el camino, la verdad y la vida, y a través de la oración, podemos acercarnos a Él con humildad y confianza.
Razones para Orar a Jesús
Salvación y perdón: Jesús nos ofrece su amor y misericordia, perdonando nuestros pecados y dándonos la oportunidad de un nuevo comienzo.
Guía espiritual: En tiempos de dificultad, la oración a Jesús nos brinda fortaleza y dirección para tomar las mejores decisiones.
Paz y consuelo: Su presencia nos llena de paz, sanando nuestras heridas y aliviando nuestras preocupaciones.
Oración a Jesús
Señor Jesús, que me conozca a mí y que te conozca a Ti, que no desee otra cosa sino a Ti.
Que me odie a mí y te ame a Ti. Y que todo lo haga siempre por Ti.
Que me humille y que te exalte a Ti. Que no piense nada más que en Ti.
Que me mortifique, para vivir en Ti. Y que acepte todo como venido de Ti.
Que renuncie a lo mío y te siga sólo a Ti. Que siempre escoja seguirte a Ti.
Que huya de mí y me refugie en Ti. Y que merezca ser protegido por Ti.
Que me tema a mí y tema ofenderte a Ti. Que sea contado entre los elegidos por Ti.
Que desconfíe de mí y ponga toda mi confianza en Ti.
Y que obedezca a otros por amor a Ti.
Que a nada dé importancia sino tan sólo a Ti. Que quiera ser pobre por amor a Ti.
Mírame, para que sólo te ame a Ti. Llámame, para que sólo te busque a Ti.
Y concédeme la gracia de gozar para siempre de Ti. Amén.
Bibliografía
– La Biblia, Evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan.- Catecismo de la Iglesia Católica, sobre la importancia de la oración.- Recursos del Vaticano sobre la fe en Cristo.
Fuente: https://www.devocionario.com/jesucristo/oraciones_1.html
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